Poco a poco los equipos nacionales que participarán en la
modalidad de Aguas Tranquilas de los Juegos Olímpicos de Londres se van
anunciando. Esta semana le ha correspondido a Sudáfrica y Dinamarca.
Por parte sudafricana, las plazas ya estaban claras desde
hace un par de meses, cuando se decidió que Bridgitte Hartley no doblaría el
200 y el 500 para concentrarse en esta última distancia y la plaza africana del
K1 200 femenino se adjudicó a Tiffany Kruger (no sin polémica, pues se renunció
para ello al K1 200 masculino), por lo que ellas dos serán las únicas
representantes de los sudafricanos en Londres, tal y como confirmó este lunes
el Comité Olímpico de su país.
Tampoco exento de polémica ha estado el anuncio de los 5
integrantes del equipo olímpico danés, más que nada por la plaza del K1 200. Sí
estaban claras, sin embargo, las demás plazas a cubrir, que finalmente han sido
las siguientes:
K1 500
femenino: Henriette Engel Hansen
K1 200
masculino: Kasper Bleibach
K1 1.000
masculino: Rene Holten Poulsen
K2 1.000
masculino: Kim Wraae Knudsen
Emil Stær
K4 1.000
masculino: Kasper Bleibach
Rene Holten
Poulsen
Kim Wraae
Knudsen
Emil Stær
Henriette Hansen no ha tenido ningún problema, pues ya desde
hace tiempo no tiene rival en su distancia, como así sucede con el k1 1.000 de
Poulsen (además reciente vencedor en la Copa del Mundo de Poznan) o el K2 1.000
del subcampeón olímpico de Pekín Kim Wraae Knudsen y su nuevo compañero de K2
Emil Stær, tras el paso definitivo de Poulsen al K1.
Sin embargo, la plaza olímpica del K1 200, conseguida en el
pasado mundial de Szeged por Jimmy Bøjesen, ha dado lugar a la ya conocida
controversia dada en muchos países acerca de los criterios de selección.
Bøjesen y Bleibach fueron escogidos por el equipo danés para jugarse la plaza
al mejor de tres competiciones: la Copa del Mundo de Poznan, la Copa del Mundo
de Duisburg y la regata nacional de Bagsværd. En ambas copas del mundo la victoria
fue para Bleibach, aunque bien es verdad que con resultados discretos. Su
segunda victoria, que le dio la plaza olímpica, se produjo con una tercera
plaza en la final B de Duisburg, siendo Bøjesen cuarto en esa misma final a tan
sólo 26 milésimas.
Así las cosas, el pasado fin de semana el ambiente era tenso
en la regata de Bagsværd, en la que también competía Casper Nielsen, el cual ha
estado durante todo este período haciendo en las copas mundiales el K2 200 con
su hermano Lasse. De hecho, Bøjesen optó por ni tan siquiera presentarse, a
pesar de estar inscrito. Y además la regata fue ganada por Nielsen con 25
milésimas sobre Bleibach, segundo. Tras la regata, un serio Nielsen dijo además
que no le sorprendía en absoluto, ya que él sabía cuál era su nivel en el K1
cuando alcanza el buen estado de forma, a pesar de estar centrado últimamente
en el K2. Sin duda un recadito al seleccionador nacional.
Con las cosas así de tensas, el director deportivo del
equipo danés Mikkel von Seelen ha salido a la palestra para calmar los ánimos.
En declaraciones a The Danish Paddling Magazine, se ha mostrado comprensivo con
los sentimientos encontrados de los palistas de 200 metros: “Si no utilizáramos
unos criterios de selección nacionales para otrogar la plaza olímpica
conseguida en el mundial del año anterior, tendríamos entonces que realizar la
selección de los palistas olímpicos con 16 meses de antelación, ya que tan sólo
un representante del país puede acudir al mundial a intentar asegurar la plaza.
Eso es incompatible con la idea de poder presentar al equipo más fuerte posible
en el momento de llegar los JJ.OO.”.
Según von Seelen, “en base a esa premisa, se determinan
cuáles serán las competiciones que determinarán a nuestros representantes con
seis meses de antelación, de forma que los interesados puedan enfocar sus
entrenamientos de la forma más ajustada posible y que, por lo tanto, puedan
llegar en igualdad de condiciones. Al ser Kasper Bleibach el vencedor en dos de
las tres, es el merecedor de dicha plaza. De cara al futuro, es importante que
todos los atletas comprendan y confíen en los criterios establecidos”.
Aún así, también reconoce que “sabemos lo que unas
Olimpiadas significan para nuestros deportistas, por eso hemos querido ser lo
más transparentes posible y tratar este tema con el requerido respeto. Y somos
conscientes de que no podemos prevenir una hipotética pregunta tras los Juegos
acerca de si se podría haber hecho mejor si hubiese sido otro palista el
seleccionado. Será una pregunta de la que nunca sabremos la respuesta”.
También coincide von Seelen con la sensación que existe en
otros países sobre la excesiva dureza de la restricción de plazas para el
piragüismo, cuando en otros deportes, como la natación o el atletismo, los
participantes pueden ser dos o tres por disciplina y no se limitan a uno por
país y tras una durísima clasificación mundial y continental. “264 plazas para
todo el piragüismo de pista, de las cuáles 80 ya se van con las K4, son tan
pocas que es evidente que muchos países están dejando en sus hogares a
potenciales medallistas”.
Tenéis todos los detalles en inglés en nuestra web amiga "The Danish Paddling Magazine" .
No hay comentarios:
Publicar un comentario