Hatton, Amorim y Birkett son los nuevos campeones del mundo sub23 de maratón tras unas vibrantes carreras

El Campeonato del Mundo de Maratón se inició el pasado viernes 20 con las carreras individuales Junior y Sub-23 en el lago Bagsværd, en Copenhague (Dinamarca).

En la competición junior de K1 y C1, Hungría dominó sin paliativos consiguiendo tres medallas de oro de tres carreras con Tamara Takacs en K1 Mujeres, Adam Petra en K1 Hombres y Kristof Khaut en C1 Hombres. Por parte española, aunque no hubo suerte de cara al medallero, todos nuestros participantes (Estefanía Fernández, Carolina Massagues, David ürsula, Samuel Yuste, Pablo Solares y Iulian Trifan)lograron terminar sus carreras sin mayores contratiempos que el altísimo nivel de los rivales.

Hatton, Brun-Lie y Carbajo liderando la prueba. Foto: Jan N (DKF)

Dos horas más tarde , con un lago en perfectas condiciones, los sub23 K1 Mujeres y C1 Hombres C1 se pusieron en marcha. Después de la primera vuelta estaba claro que Teneale Hatton (NZL), recientemente coronada campeona del mundo de 5.000 metros, quiso marcar el ritmo con el fin de tener la carrera bajo su control. Después del segundo porteo el grupo de cabeza se redujo a tres palistas : Hatton , Agnes Brun-Lie (NOR) y Raquel Carbajo (ESP), abriendo una brecha de alrededor de 30 segundos sobre un grupo de seis palistas en el que estaban, entre otras, Susanna Cicali (ITA) , Noami Horvath (HUN) y Nuria Villace (ESP) y Lize Broekx (BEL). Las tres líderes se cuidaron de mantener la brecha abierta, relevándose bien en cabeza para poder mantener todo bajo control hasta la última vuelta.

A cinco kilómetros para el final, la húngara Naomi Horvath lanzó desde atrás su órdago a la vez que Agnes Brun-Lie comenzaba a sufrir y parecía perder contínuamente la ola en cabeza. Horvath iba entonces decidida a cerrar la brecha. Esto obligó a las líderes a incrementar su ritmo. Aunque la húngara llegó a estar a apenas 100 metros, en el último porteo estaba claro que las tres medallas ya estaban decididas, aunque no su orden. Agnes Brun-Lie parecía sufrir en los primeros pasos del porteo y perdió contacto con las rápidas Hatton y Carbajo . Hatton fue la primera en embarcar y abrió unos metros de ventaja, pero la española hizo un esfuerzo supremo y la alcanzó de nuevo. Con la medalla de oro en juego, Carbajo hizo su movimiento final, tomando valientemente la delantera después de la última ciaboga y tirando con fuerza los 500 metros restantes , pero Hatton no se puso nerviosa y esperó a que llegase su momento. A tan sólo 150 metros de la meta la neozelandesa sacó a relucir su clase de velocista y pasó a Carbajo para conseguir su primera medalla de oro en maratón. Carbajo se quedó con la medalla de plata , y Agnes Brun-Lie se llevó el bronce bajo la presión de Horvath , finalmente cuarta. Nuria Villacé entró poco después en una lograda quinta posición.

En C1, los recientes campeón y subcampeón europeos, Samuel Amorim y Rui Lacerda (POR), llevaron bajo su mando la carrera junto con Pierrick Martin ( FRA), consiguiendo desembarazarse de los húngaros Szaba y Dacza, que eran sus grandes rivales después de que Alan Ávila, quien estaba llamado a lucharles el título, se quedase descolgado ya tras la primera vuelta aquejado de una inoportuna infección de garganta que le tuvo con fiebre el día anterior. Después de dos vueltas, las medallas ya estaban claras para los portugueses y el francés.
Después de un último porteo muy rápido y afrontando un largo sprint, Martin (FRA) trató de abrirse para pasar a Amorim (POR) , mientras que Lacerda (POR) no parecía estar tan fuerte como sus rivales. Por último , Amorim logró aguantar el ataque de Martin y consiguió la medalla de oro. Martin obtuvo la plata y el bronce fue para Lacerda.

La última carrera del viernes fue un intenso y muy emocionante K1 Hombre Sub-23, con un plantel de salida muy competitivo. Rápidamente el grupo de cabeza quedó conformado por cuatro parejas: Hamar y Minde (NOR), Havas y Boros (HUN); Birkett y van der Walt (RSA) y Fidalgo y Llorens (ESP), a los que se sumaba un luchador solitario de Dinamarca, Martin Larsen. Los porteos estaban siendo cruciales desde la primera vuelta , ya que los que estaban en la parte de atrás del pelotón sufrían para regresar a la ola. Los británicos Jonathan Tye y Tom Sharpe comandaban a los perseguidores, que mantenían una distancia de unos 30 segundos.

Birkett y Havas afrontan en cabeza uno de los porteos. Foto: Jan N (DKF)

La situación no cambió hasta el cuarto porteo , cuando Birkett y Havas aplicaron un poco de presión y dividieron el grupo en dos. A ellos se unieron Llorens, van der Walt y Hamar , mientras Minde (que acabó abandonando tras doblar el timón), Fidalgo, Larsen y Boros se quedaron entre 20 y 30 segundos por detrás en toda la quinta vuelta. En el siguiente porteo Llorens no pudo sostener el ritmo más y los líderes hicieron un diamante perfecto para afrontar los últimos 5 kilómetros.

En este punto, los cuatro líderes se dieron cuenta de que uno de ellos no se iba a llevar medalla, así que la reserva de energía pasó a primer plano. Incluso dejaron de palear y se quedaron mitrando unos a otros para ver quién iba a tomar la responsabilidad de tirar. Entonces Hamar se fue a por todas y se marcó un poderoso sprint hacia la última ciaboga de la vuelta larga. Fue luego Birkett quien se puso al frente para entrar en el sexto y último porteo.  Hamar sin embargo desembarcó perfectamente y tomó la delantera. Con una vuelta final de 100 metros por delante, el húngaro Havas se quedó 20 metros por detrás, sin la esperanza de una medalla.

El príncipe Frederik de Dinamarca en la pista de Bagsværd (derecha)

El sprint final fue iniciado por Hamar, intentando sacar sus habilidades de sprint contra los sudafricanos , pero Birkett lo pasó de una manera tan poderosa que sólo van der Walt pudo quedarse en su ola. Hamar tuvo que aceptar el bronce mientras que los dos sudafricanos hicieron que el numeroso público (entre los que se encontraba el príncipe Frederik de Dinamarca) se volviera loco con el Sprint más apretado de todo el campeonato. Al final, Andrew Birkett ganó por apenas unos centímetros, reclamando su primer título mundial ante un rapidísimo Brandon van der Walt que tuvo que conformarse con la plata. A poco más de un minuto, Guillermo Fidalgo fue finalmente séptimo superando al final a un Llorens que acabó octavo tras darlo todo en el grupo de cabeza.