Kiko Vega y Santiago Scalesi tras vencer la 1ª etapa. Foto: Claudio Espinoza |
El sábado se celebró la etapa inaugural entre Senillosa y Neuquén. Bajo un calor de justicia los primeros kilómetros de la etapa fueron los habituales en el Río Negro, con un grupo numeroso de K2 al frente, pues la carrera es larga y el poco descanso hace que haya que ir reservando fuerzas desde el principio.
Sin embargo, ya mediada la etapa estaba claro que este año, salvo sorpresas o grandes hundimientos, el podium es cosa de tres, aunque la emoción estará en saber cuál es finalmente su orden. Por delante se fueron Pinta-Mozzicafredo, Vega-Scalesi y Balboa-Guerrero, dejando por detrás en tierra de nadie a los neuquinos Vázquez y Reyes, que parecen ser los elegidos para estar alerta a la espera de algún desfallecimiento de los de arriba.
En la llegada a meta, Kiko Vega y Scalesi, que apenas entrenaron juntos 3 días antes de la prueba, consiguieron una importántisima victoria ante Pinta y Mozzicafredo, mientras que Balboa y Guerrero bajaban los brazos ante la imposibilidad de aguantar el sprint. Pero casi más importante que los 7 segundos de diferencia en meta fue el hecho de que ésta era la primera etapa que no se adjudicaban Pinta y Mozzicafredo desde 2008. Un golpe de moral para Scalesi y Vega, que quieren dejar claro que este año vienen decididos a por la victoria.
La segunda etapa, entre Neuquén y General Roca, siguió aproximadamente el mismo guión, aunque la polémica hizo acto de aparición en el último tramo de etapa, habiendo que realizar una ciaboga y entrar en meta tras un tramo contracorriente. Néstor Pinta acusó a Franco Balboa de abordarle antirreglamentariamente en la ciaboga, privándoles de disputar el sprint en buena posición. La victoria fue para los sub23 Balboa-Guerrero, con Vega-Scalesi en segunda posición y aventajando en 7 segundos más, importantísimos, a Pinta y Mozzicafredo, con lo que la pareja hispano-argentina mantiene el liderato de la prueba.
Respecto a las acusaciones de Pinta, Balboa declaró que el actual campeón no debería hablar de un pequeño detalle en el sprint final cuando él se dedica la etapa entera a cerrarse mutuamente con Vega y Scalesi contra los árboles y las orillas poco profundas, guerra en la que el propio Balboa y su compeñero guerrero han decidio no entrar para evitar males mayores. Vistas estas declaraciones, las próximas etapas se esperan calentitas, más teniendo en cuenta las escasas diferencias entre los primeros de la clasificación.
En K1, sin la presencia este año de Darío Dal-Bo, el argentino Pascual Orellana parece no tener rival tras las dos primeras etapas. Cómodamente colocado en grupos de K2, ha vencido con facilidad ambas etapas y aventaja ya a Gastón Gaona en minuto y medio, siendo éste el único que parece capaz de estar al acecho para aprovechar cualquier problema del líder.
Ésta es la clasificación general tras las dos primeras etapas:
No hay comentarios:
Publicar un comentario